Preceptistas
hampones
Antonio García Velasco
Sólo
sabían dictar, recordar, hacen cumplir preceptos. Los preceptos y su
cumplimiento eran más importantes que la vida, que la creación, que la
improvisación alocada de la felicidad. Se quería regular todo a base de
preceptos. Las gentes iban poco a poco asumiendo los cánones y aceptando sin
discusión lo decretado como políticamente correcto, sanamente comestible,
insanamente fumable, el modo de escribir, el modo de tallar una escultura, el
modo de pintar un cuadro... Todo quedaba previsto en el grueso volumen de
Normativa. Y, si no, para ello estaban los preceptistas siempre dispuestos a
dictar, recordar, hacer cumplir preceptos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario