jueves, 12 de enero de 2017

29 Microrrelato La frustracón de la luz


La frustración de la luz

Antonio García Velasco



En medio de la muchedumbre de la plaza, había un turista mirando boquiabierto la fachada de la catedral. Y, de pronto, se apagaron todas las luces de la ciudad. Una voz gritó por encima de los inquietos murmullos: "¡Cada uno a sus deseos!" El turista era extranjero y no hablaba ni entendía español. Dijo en su idioma que "no comprendía". Uno de los más cercanos respondió: "Que cada uno haga lo que desee". Como todo era oscuridad, nadie sabía quien besaba, quien abrazaba, quien palpaba, quien robaba, quien golpeaba, quien disfrutaba, quien se defendía... Las luces volvieron provocando muchas frustraciones y amarguras.

1 comentario:

  1. Yo estuve allí y doy fe que que así fue. Saludos Antonio, me ha encantado!!!

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