jueves, 2 de marzo de 2023

112Microcuento LOS GATOS


 

Microcuento LOS GATOS

Antonio García Velasco

 

Vivía en el ático de un edificio de seis plantas con sus dos gatos. Conoció a Isabel Higueras una mañana en el supermercado cuando compraba comida para sus mascotas y ella le aconsejó la nueva marca que adquiría su amiga Amparo que también tenía

félidos domésticos de pelaje suave.

—Dice siempre que la suavidad y dulzura del pelo de sus gatos ha aumentado desde la nueva alimentación.

 

 

Semanas más tarde, él la invitó a su casa para que conociera sus gatos y los efectos de haberle hecho caso en el aconsejado cambio de alimentación. Fue el comienzo de una relación sentimental.

 

Con satisfacciones vivieron juntos y celebraban las caricias al pelaje de los animales. Pero el paso del tiempo puede erosionar la armonía y, en efecto, la primera desavenencia surgió cuando la sorprendió fugando a sus gatos.

—No me han gustado esos bufidos injustificados.

—Disculpa.

Pero la semilla de los celos en forma de pensamientos de que quería a los animales más que a ella fue creciendo en su interior. La semilla se hizo zarza punzante cuando supo que estaba embarazada.

 

En su ausencia, una tarde, metió los felinos en una talega y subió al autobús. En el barrio más extremo de la ciudad, donde conocía establecimientos que daban gato por liebre, abandonó su carga junto a los contenedores de basura.

 

Cuando él se percató de la ausencia de sus mascotas y preguntó por ellas:

—Estoy embarazada —fue la respuesta de Isabel.

—¿Qué tiene eso que ver con la desaparición de mis félidos?

—Un hijo vale más que un gato.

—Es posible tener gatos y tener hijos. ¡Dime qué has hecho con ellos!

Ella guardaba un exasperante silencio. Y, sin más, él se fue a su cuarto, rebuscó en los cajones del armario, llenó de balas el cargador de un viejo revolver de colección y lo descargó a bocajarro sobre el pecho de la mujer.

5 comentarios:

  1. Enhorabuena por tus relatos, que siempre enseñan.
    Dejarse llevar por los celos y el egoísmo hasta el extremo, como en este caso, trae muy malas consecuencias. La salud mental es primordial para no dejarse llevar hasta el más duro desconcierto.
    Un abrazo.

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  2. Para mí, que el problema de la protagonista, es la falta de sentido común...
    Que es lo mismo que decir que tiene ideas incoherentes... Lo que la lleva a obrar con incoherencia...

    La falta de capacidad para sopesar los acontecimientos, nos aleja de la realidad y esa situación de "pensar con una visión irreal", entra dentro de la locura, en sentido amplio...

    Las consecuencias a las que se llega en el cuento muestran la gravedad de la falta de "sentido común", tan a la mano hoy día...

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  3. No hay que dejarse llevar siempre por nuestros pensamientos, que a veces
    pueden ser erróneos, llevándonos a malos sentimientos.
    Tener capacidad de diálogo en la convivencia en pareja es fundamental.
    Veo a la mujer un tanto equivocada en sus pensamientos que la llevan a actuar de una forma irracional.
    Por su parte el hombre tiene una respuesta exagerada, desmesurada e impulsiva ante los nuevos acontecimientos, que le lleva al fatal desenlace.

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  4. El diálogo es un intercambio de entendimiento entre dos personas. Las argumentaciones han de ir preñadas de ánimo aproximativo. Lo contrario desemboca en monólogos egocéntricos. La falta de escucha bifurca los proyectos comunes. Los difumina en malentendidos perniciosos. Una vida en común se trenza con las conexiones comprensivas aunando las palabras y las acciones a través del gen intracomunitario. Sí se opta por la convivencia impositiva, se activa un aire explosivo que podemos inhalar, cual veneno mortal. Ese momento queda al albur de la paciencia de Cronhos. Justo el dios que se olvida de reconducir los momentos porque él mismo subsiste en una sucesión plana de ellos.

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  5. Buenos días,

    llegué a usted por la presentación de Voces perdidas voces olvidadas. Tenemos una revista cuyo título lo encabeza, precisamente, una mujer olvidada, Teresa Mañé. Sería genial que tanto usted, como cualquiera de sus colegas (y quienes ahora nos estén leyendo), enviaran artículos en este sentido (mujeres olvidadas que trataron de formar parte del cambio social para un mundo mejor, o al menos, mejorar disciplinas científicas en esa línea) a nuestra revista: https://ojs.eumed.net/rev/index.php/educacion_analisis_social

    Saludos cordiales

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