sábado, 31 de diciembre de 2016

Consurso de inventos


Concurso de inventos

Antonio García Velasco




DECIDIÓ el rey, a la vista de tanta concurrencia, que sus cortesanos hicieran una selección previa. Pero todos querían presentar sus maravillosos inventos al propio monarca. Para evitar protestas se organizaron turnos y cada cual tuvo su oportunidad. En consecuencia, también Juan pudo presentar su invención: un humorístico pingüino robot capaz de reírse incluso de sí mismo. El rey no pudo resistir que una mala imitación de ave incapaz de volar despertase la risa a costa de su real persona. Juan el Inventor fue llevado a la cárcel acusado de no respetar las instituciones. Los circuitos del robot fueron reprogramados para que sólo cantasen alabanzas propagandísticas del régimen.

viernes, 30 de diciembre de 2016

Gaitas desafinadas


Gaitas desafinadas

Antonio García Velasco



CONTESTÓ el alcalde a la demanda de los vecinos: "Los peces tienen derecho a la vida. Y pronto, de seguir con las capturas, morirán todos". "De acuerdo, respondió Frasco, pero también nosotros tenemos derecho a seguir viviendo. Para ello necesitamos comer. Y la pesca nos proporciona lo necesario". "Si no prohibimos la pesca, en pocos meses no tendremos peces que capturar", "Ya nos dirás, entonces, qué vamos a hacer". "Por lo pronto no salir de pesca: son las directivas más adecuadas y aconsejables". "Nos dedicaremos, pues, a tocar la gaita". Y, por las calles de la ciudad, se escuchan desde entonces las gaitas desafinadas de los pescadores que no tienen otra alternativa.

El pirata Patapalo


El pirata Patapalo

Antonio García Velasco



Un barco pirata fue atacado en el puerto de la isla que le servía de refugio. El abordaje no procedía de barcos del Imperio, sino del terrible Patapalo, el anárquico corsario que no respetaba a propios ni a extraños y siempre trataba de imponer su voluntad. El buque refugiado fue hundido; el poblado deshecho; quienes pudieron salvarse huyeron al interior de la isla, donde fueron perseguidos hasta la extinción. Patapalo pasó a la historia con el nombre de Terrible. Algunos de sus descendientes aún se sienten orgullosos de las hazañas de su ancestro. Y, de alguna forma, las emulan desde sus cargos gubernamentales o administrativos.

jueves, 22 de diciembre de 2016

Microrrelato Quijotesco

Quijotesco
Antonio García Velasco

Los amigos llegaron a saludarlo y a manifestarle su contento por la vuelta. Lo encontraron totalmente apenado por la noticia de que "Wu-wang mandó dar muerte a uno de los considerados réprobos llamado Cheu-sin, injustamente despreciado por todos los seguidores del emperador". "Soy contrario a la pena de muerte, a las condenas sin juicio previo, a los abusos de poder". Resultó inútil que los amigos le explicaran que Wu-wang vivió hacía más de tres mil años. "La injusticias no deben tener fecha de caducidad", respondió. "Pues exige justicia a Wu-wang que murió en el 1116 a.C.". Desde entonces vive  con la obsesión de viajar en el tiempo.

miércoles, 21 de diciembre de 2016


Mostrar las vergüenzas

Antonio García Velasco



Como tenía los pantalones descosidos por la entrepierna, mostraba sus vergüenzas sin darse cuenta. La secretaria lo contaba a todos por teléfono, aunque nadie parecía creerla o querer escuchar. Ella continuaba afirmando que era cierto su relato. "Estaba presidiendo el consejo... Todos pudieron verlo". "No levantes falsos testimonios", le dijo su interlocutora. "Que te estoy contando la verdad..." "Por motivos de seguridad, esta conversación está siendo grabada", escuchó desde el otro extremo al realizar una nueva llamada. A los pocos minutos llegaron dos agentes de la policía y se la llevaron esposada.

Isla desierta

Antonio García Velasco



Preguntó en voz alta: "¿Quién vive aquí?" Prosiguió dando gritos y, al no escuchar respuesta, concluyó: "Soy la única persona que vive en esta isla, pero bien me gustaría tener una compañera". En aquel momento la vio: sentada, en pose de modelo, bella como ninguna. Atractiva. Pensó: “Estoy soñando”. Al acercarse a ella, escuchó una voz celestial que decía: “No es bueno que el hombre esté solo; por ello he creado a una persona como tú para que os hagáis compañía”.

lunes, 19 de diciembre de 2016

El informe delirante


El informe

Antonio García Velasco



Como no iba suficientemente abrigado temió coger un resfriado. Pero pensaba: "Allí me dio su pecho..." Continuó caminando. Cuando llegó a su casa, la encontró atrincherada tras la mesa rebosante de papeles: "Tengo mucho trabajo". "Aquello que me diste el otro día quiero", dijo guiñando el ojo. "Hoy tengo mucho trabajo", repitió la mujer. "Y me llaman por teléfono recordándome que mañana tiene que estar el informe terminado". "Es imposible leer esa masa ingente de papeluchos", argumentó él. "Son documentos muy valiosos", respondió ella. "¿Para quién son valiosos?" "Para la empresa, por supuesto". "Está prohibido traer el trabajo a casa". Y, con las mismas, arrojó los papeles al fuego de la chimenea. Ella comenzó a reír y así fue como, frente a las llamas, los dos entraron en calor. Él evitó el resfriado y tuvo aquello que me diste el otro día. Ella entregó un informe delirante y perdió el empleo.

domingo, 18 de diciembre de 2016

Memoria histórica y presente

Memoria histórica y presente
Antonio García Velasco

"FOLGABA el rey Rodrigo con la hermosa Cava en la ribera..." Sí, claro, sería un sueño de placer, pero estaba olvidando el mal de la inminente invasión musulmana a la España visigoda y cristiana. No volvieron las cosas a ser como eran, No hay marcha atrás cuando los acontecimientos interrumpen su curso y otros elementos imponen su dictado. Rememorar la historia tiene su sentido, pero, en aquellos momentos preocupaban otros aconteceres: no aparecían los titiriteros y las horas iban transcurriendo. Los festejos oficiales se paralizaron y la gente comenzó a buscar otras diversiones. Acusaron directamente a la Cava: el caso resultó morbosamente interesante y Paquita, concejal de festejos y cultura, dijo que los que hablaban de aquella forma acusatoria no tenían vergüenza y ni la habían conocido. Tomaría medidas. Cuando llegó a casa, machacada por el peso de las acusaciones y el fracaso de la fiesta patronal, el hijo le anunció que era capaz de ir a buscar a su padre y preguntarle directamente: "¿Por qué te fuiste, por qué?" En el accidente de coche habían muerto tres miembros de la farándula.

sábado, 17 de diciembre de 2016

El fantasma de las tres gracias


Las tres gracias

Antonio García Velasco



Dijeron que en aquel castillo deshabitado había fantasmas. Reflexionó sobre el hecho y trató de convencer a sus amigos para desafiar a los espectros. Sus amigos pasaron del desafío. Él, como Juan Sin Miedo, entró soportando el infernal ruido de los goznes de las puertas al abrirse. Recorrió las estancias y los lémures no se hicieron visibles. Pero él seguía teniendo el pálpito de su existencia. Sacó sábanas nuevas de los baúles de exterior empolvado. Dejó los paños estratégicamente distribuidos. Aquella noche, los fantasmas no pudieron resistir la tentación de cambiar sus viejas sábanas por alguna de las muchas que estaban viendo. Tan sólo pudo fotografiar a las tres gracias en el momento de mudar sus viejos atuendos.

viernes, 16 de diciembre de 2016

Regreso


El regreso

Antonio García Velasco



Ramiro había regresado de un viaje de tres meses y se encontraba muy cansado. Pero recordó: "...allí me enseñó ciencia muy sabrosa..." Marchó al encuentro de ella, pese al cansancio. No tenía noticias de que la Fortuna la había favorecido con un premio millonario. Era como otra persona. Desde el saludo, todo fue decepcionante. "Torna a cobrar el tino", le dijo. Pero, ella, en su delirio de grandeza, no paraba de hablar contándole historias, manipulaciones y proyectos. "Torna a cobrar el tino", repitió antes de caer al suelo. Ella pidió socorro a los amigos que, ahora, siempre mariposeaban a su alrededor. Ellos, alarmados, lo llevaron al hospital. El médico ordenó que nadie entrara en la habitación y así fue como consiguió descansar durante dos días seguidos, tras los cuales, desapareció. Nadie ha sabido lo más mínimo de Ramiro.


jueves, 15 de diciembre de 2016

Diáspora tristísima


Diáspora

Antonio García Velasco



El cauce del río estaba cada día más contaminado. Lo mismo le ocurría al agua del lago. Por ello, los humanos habitantes de aquel valle decidieron marcharse a un lugar acogedor. Pero todas las zonas estaban ya ocupadas por otros humanos que no siempre se mostraban dispuestos a compartir. De ese modo, aquellos que fueron colonos de una tierra fértil se convirtieron en emigrantes buscando la acogida de zonas hospitalarias. Han pasado muchas décadas y, todavía, no ha vuelto el valle a ser como era antes de la colonización. Tampoco sus colonos primigenios han encontrado lugar donde asentarse, salvo donde se han instalado por la fuerza dominadora.


Invento novedoso: el balachivi


El balachivi

Antonio García Velasco



UNA vez había lejos lejos, en los confines del mundo, una aldea perdida. En la aldea había, entre otras, una casa rodeada de un inmenso jardín en la que vivía un músico inventor. Había creado el balachivi, con el que, de modo preferente, daba sus conciertos. Como las gentes de la tierra no habían visto nunca aquel instrumento musical, acudían en tropel a los lugares donde el músico actuaba. Por otra parte, su música era tan encantadora como el canto de la dulce Filomena. Pero el balachivi parecía marchitar las flores ajenas y reavivar las del jardín de la casa, donde cada vez era más primavera frente a los angostos veranos circundantes.



miércoles, 14 de diciembre de 2016

Mundo robot


Mundo robot

Antonio García Velasco



HABÍA mucha gente alineada a lo largo de la avenida por la que pasaría el desfile de robots. La figura que más pánico y admiración causó fue el
acompañado por un ciempiés robot, a modo de perrito de compañía. De color verde eran los dos. Recorrían la calzada con pasos firmes y decididos, como dueños del mundo. Nadie pudo apartar la mirada de aquella imagen. Estaban todos fascinados, prendidos en una suerte de éxtasis sublime. Sólo Esperanza se deshizo de la fascinación y se volvió a las páginas del libro; “…los profesionales están fuertemente divididos al valorar el impacto que el avance en la Inteligencia Artificial y la robótica tendrá sobre el mercado laboral…  Entonces sus compañeros comprendieron y comenzaron a temer por su trabajo.

martes, 13 de diciembre de 2016

Cambio de vida


Cambio de vida

Antonio García Velasco



En aquellos momentos, tenía una sola moneda en el bolsillo. La ocurrencia fue comprar un boleto de lotería. Un golpe de suerte lo favoreció con un premio de varios millones de euros. Hasta su exnovia, que rompió con él por considerarlo un inútil fracasado, trató de volver. Los banqueros, que antes le habían denegado ayuda, lo buscaron para que invirtiese sus dineros en los fondos más rentables. Se llevó a casa todo el caudal conseguido. Un día salió con un maletín cargado de billetes y un muchacho se lo arrebató. El ladrón salió corriendo con el botín cuando, al cruzar la calzada, un coche derrapó atropellándolo. Para el conductor, la culpa fue del mal estado del asfalto y no de la velocidad. Él, que había contemplado lo ocurrido, pensó "Sólo el dinero es culpable". Comenzó a repartir billetes y monedas por la calle. La gente lo tomó por loco y, muy pronto, quedó internado en un centro psiquiátrico.

lunes, 12 de diciembre de 2016

La venta de esclavos


La venta de esclavos

Antonio García Velasco




Un rey, sentado en una tribuna, presenciaba la venta de esclavos. Un médico trabajaba tanto en la investigación de remedios medicinales que sus compañeros comenzaron a preguntarle si es que pensaba heredar el hospital o curar él solo a todos los enfermos del mundo. Conocida tal dedicación por el rey, lo mandó llamar. "En primer lugar, Majestad, no admito la esclavitud", dijo el doctor, sin esperar a que el monarca, absorto en la contemplación de la subasta y de la animadora, le permitiese hablar. "Eres atrevido en verdad. ¿Se puede saber por qué no admites la esclavitud?". "Todos los seres humanos somos iguales". "¿Todos son reyes? Estás desvariando". La bailarina seguía sus movimientos ajena a la escena de la tribuna... Irrumpieron los piratas. Vencieron. El Capitán felicitó a Espada Cortada por sus valerosas hazañas. Ni el rey pudo seguir contemplando la venta de esclavos ni el doctor continuar sus investigaciones.


Caminos inescrutables


Los inescrutables caminos de Dios

Antonio García Velasco



La gran dosis de ternura que el joven sentía por la bella niña quería manifestarse en forma de poema. Lo consiguió al fin, pero un poema como aquel, en contra de lo esperado, causó la risa y un sonrojo burlón en las mejillas. Mas peor fue la guerra. Ella murió en un bombardeo... Todo era ahora un recuerdo tristemente inolvidable, ¿quién le diría que fuese a vivir tales escenas de pánico? A Dios se consagró. De sus experiencias, sufrimientos y observaciones presentes saca los temas y los ejemplos para preparar sus sermones y, de ese modo, se ha convertido en el predicador más sabio y famoso de la ciudad. A las niñas bellas, no obstante, las contempla con nostalgia.


viernes, 9 de diciembre de 2016

La competición


La competición

Antonio García Velasco




UN muchacho del pueblo vecino iba pregonando que él sería el ganador, pues se había entrenado durante muchos meses para vencer a cualquier competidor. Su pueblo, según explicaba, era más del futuro que del presente. Más de los sueños que de los despiertos. Pero ello no había impedido su entrenamiento y estaba seguro de ganar.  Se tendría que enfrentar con el pescador obligado a cambiar de oficio por el extraño ser que lo arrastró al fondo del río mientras le explicaba: "Soy el espíritu de las aguas del río y estoy cansado de que todos los días me arrebates varios de mis peces". El pescador le había respondido, a modo de excusa y justificación: "Necesito pescar para comer". "Pues desde hoy te buscas otro oficio, porque debo hacer cumplir las directivas de Bruselas sobre la preservación de los peces de este hábitat fluvial. De lo contrario, no te dejaré abandonar el fondo de este cauce". Así fue como, para cambiar de oficio, el pescador decidió enfrentarse con el recién llegado del pueblo antiguo o futurista. Y... ¿qué pasó entonces? En toda competición hay siempre un ganador. Se admiten apuestas. Al muchacho la amiga tuvo que enseñarle el modo de abanicarse de manera eficaz. El pescador estaba suficientemente acostumbrado al calor y no tuvo necesidad de abanico.


La frontera


La frontera de quien llegó antes
 Antonio García Velasco
Al llegar a la isla tras el hundimiento de su barco, tuvo un fuerte encontronazo con el náufrago anterior. Éste se había posicionado como dueño y señor; había colocado una barrera en la playa a modo de aduana y exigía un visado para entrar o una fuerte suma de dinero para los trámites de regularización de papeles. Fue inútil explicar que su barco se había hundido y con el hundimiento había perdido todas sus pertenencias, incluidos documentación y dinero. Era una isla ridícula, aunque suficiente para la convivencia de dos personas que, sin duda, estarían esperando la llegada del buque de los tiempos mejores que los devolviese a ambos al mundo civilizado.
"Te recluiré en el Centro de Internamiento de extranjeros", anunció el náufrago primero, armado con el fusil de cerrojo que le daba la superioridad. Lo ató a la palmera con la correa que sus pantalones. "Esta tierra es mía porque llegué el primero". "La soledad te ha hecho perder la razón", contestó el segundo náufrago. La respuesta del otro fue propinarle un brutal culatazo en la boca. "Te acusaré de malos tratos". "Deja de decir sandeces: yo soy la autoridad en esta tierra Y no admito críticas ni posturas rebeldes. De lo contrario, ya te estás repatriando". Guardó silencio el náufrago número 2, aunque pensaba: "Es ridículo. Entre los dos podríamos incluso construir una balsa que nos sacara del aislamiento. Ha perdido la razón". Lo peor de todo es que, muy pronto, también él comenzó a desvariar.

miércoles, 7 de diciembre de 2016

Carrera libre


Guillermo Corre Libre

Antonio García Velasco



No era un monito saltarín. Se trataba de Guillermo Corre Libre, un joven alocado e inmaduro que siempre iba con prisas, raudo como el viento huracanado. Un día quiso asistir a un espectáculo teatral y, al entrar con sus bullas habituales, la sala se transformó en enredo enloquecido, como el de un mercado en vísperas de fiesta. Nadie encontraba explicación para lo que ocurría y, como la función no comenzaba, las protestas fueron creciendo. El primero que se aburrió en la espera fue Guillermo Corre, que, corriendo, abandonó el local. Volvió la calma de modo tan inexplicable como había comenzado el alboroto.
La tragicomedia, fantástica, terminó cuando ella, la protagonista, harta de sometimientos y fatigas, después de pensarlo más de dos veces, le dijo al águila de los sueños "Llévame en tu lomo" y el animal la aceptó como huésped para dejarla junto a Guillermo Corre Libre.

martes, 6 de diciembre de 2016

Amor platónico


Amor platónico

Antonio García Velasco


POR aquellos años, construyeron los padres de la graciosa, hermosa, tierna Clarisa una mansión espléndida y él pensó que tendrían casi tanto caudal como ella hermosura. Era hija única y sería la heredera. "Pero soy un humilde monstruo de Frankenstein. Feo, deslavazado, lleno de burdos costurones... Imposible enamorarla. Imposible reproducir la historia de la bella y la bestia. Imposible entonar juntos canciones de amor... Me resigno... Y seguiré reconcomido por la tristeza hasta el fin de mis penosos días".


sábado, 12 de noviembre de 2016

De Oposición a Colaboración

De oposición a colaboración

Antonio García Velasco

Los partidos de la oposición tienen como lema el que tenía Jaimito en aquella historieta: venía desde lejos al grupo de amigos diciendo: “No estoy de acuerdo, no estoy de acuerdo” y, cuando llegaba al punto de la reunión, preguntaba: “¿De qué estáis hablando?”. El nuevo, o nuevo viejo, gabinete de Rajoy tiene forzosamente que ser dialogante y los partidos que no están en el gobierno, aun en los casos de que esperen estar en el futuro, tendrían que aprovechar la ocasión para afianzar el papel legislativo del congreso de diputados. Dejar al ejecutivo su papel de tal y, en consecuencia, que legislen los diputados (hombres y mujeres, no hay que decirlo) para, en vez de oposición, las leyes surjan por colaboración y diálogo, nunca por la dictadura de la mayoría absoluta. Después, a la hora de que el gobierno rinda cuentas, los partidos han de ser duros, críticos, intransigentes con lo legislado y no ejecutado. Pero, ¿es que algún político cree en la división de poderes y está por conseguirla?
Si el presidente está en su derecho de nombrar a sus colaboradores ministros, que lo haga, como lo ha hecho. El reproche ha de venir cuando, en algunas de las parcelas o ministerios, traten de darnos gato no legislado por liebre legislada y aprobada por todos.
 ¡Cuánto nos queda que por aprender para ser demócratas! Porque seguimos con la mentalidad de que el más pillo siempre gana la partida y, en ocasiones, el partido.

miércoles, 2 de noviembre de 2016

Comentario a un breve poema paradigmático de Luis Cernuda

UN BREVE POEMA PARADIGMÁTICO EN LA POESÍA DE LUIS CERNUDA


Papel Literario Digital publica el comentario al siguiente poema de Luis Cernuda:
En soledad. No se siente
el mundo, que un muro sella;
la lámpara abre su huella
sobre el diván indolente.
Acogida está la frente
al regazo del hastío.
¿Qué ausencia, qué desvarío
a la belleza hizo ajena?
Tu juventud nula, en pena
de un blanco papel vacío.

Se puede acceder al mismo en 
http://papel-literario.com/index.php?id=1213&tx_ttnews%5Btt_news%5D=15512&cHash=15d71db8b177778d833febb608e9760c


Revista digital de Literatura y Crítica Literaria



lunes, 22 de agosto de 2016

Portada posible para ALTOS VUELOS

Encuentro para ALTOS VUELOS


Antonio García Velasco

He encontrado en facebook, en las páginas de Sandra Regina Marangoni (Vamos a falar de cotidiano, história e filosofia) una foto que parece creada para la portada de mi novela ALTOS VUELOS:

El volador podría ser perfectamente el personaje Simón Cantalicio, practicante de una religión cuyo mandamiento principal es "Nunca te trasladarás de un lugar a otro por medios ajenos a las capacidades naturales de tu propio cuerpo". Al ser objeto de mofa por la intolerancia de unas gestes acostumbradas al desplazamiento mecánico, Simón Cantalicio siento un misterioso impulso que lo eleva y le permite volar por si mismo. Ha sido, pues, un hallazgo esta composición magnífica, que ni hecha de encargo.
La portada original del libro en su última edición digital es:

Este libro puede encontrarse en la editorial LIBROS ENCASA, pero también en www.amazon.es 

miércoles, 15 de junio de 2016

La adivinanza

La adivinanza
Antonio García Velasco

Nunca supe leer,
nunca supe escribir.
Pero los libros lees
gracias a mí.

Sí, cierto, se trata de una adivinanza. Pero más fácil que la planteada sobre quién ganará las próximas elecciones. Y con más facilidad que el acertijo sobre el porvenir de España con el gobierno que venga tras esas elecciones.

La respuesta de una niña fue: “Mi abuela”. “A ver, Margarita, ¿por qué tu abuela?” “Porque ella no sabe leer ni escribir, pero es la que compra los libros para mi hermano y para mí. Es que, verá, mi padre está en el paro y mi madre sólo da unas horas limpiando casas. Mi abuela nos ayuda con su pensión y sus ahorrillos. A veces nos compra libros para que no seamos analfabetos como ella”.

Antonio se lo tomó de otra manera y dijo que la respuesta es el papel: “El papel –explicó- no sabe leer, ni sabe escribir, porque no es una persona, pero sobre él se escriben los libros”. “Pero el papel no habla” –le puntualicé para ver su respuesta. Y razonó: “En la imaginación todo es posible, profesor. Pero ya también hay que decir que la respuesta es la tableta, el e-book o el soporte electrónico del libro, ¿no cree?” “Sí creo”, dije, admirado de los niños tan repelentemente sabihondos entre los que impartía el taller de lectura y escritura creativa.

Alba nos dijo que son las letras: “Una letra no sabe leer ni escribir, pero sin letras no hay libros”.  Rosa apuntó que eran las palabras, que tampoco saben leer ni escribir, pero sin palabras no hay literatura, no puede haber libros”.

“¿Alguien da otra respuesta?”. Y fue Ana quien, habiéndose asomado a Internet, dio la respuesta en la que había pensado el autor o autora de la adivinanza: “La imprenta –dijo-. Fue un gran invento y los libros se abarataron a su costa y pudimos leerlos hasta los más pobres. Antes de la imprenta, los libros eran muy caros y salvo los ricos nadie podía costearse una copia”.


¡Qué barbaridad! Estos niños, a lo mejor, nos solucionaban el gravísimo problema de las dos Españas, lamentablemente irreconciliables, en guerra civil permanente, aunque no siempre tenga la belicosidad de los fusiles  o los bombardeos. ¿Lo solucionarán en un futuro?

miércoles, 1 de junio de 2016

Entrevista a Carlos Guillermo Navarro

Entrevista a Carlos Guillermo Navarro
Antonio García Velasco

Carlos Guillermo Navarro es un novelista indiscutible. Lo avalan sus obras: El toque de rebato (1999), Por la ruta de los mares (2002), Apuntes de una crónica negra (2006), El paraíso de las flores marchitas (2013) y el libro de relatos Crónicas narradas, cuya primera versión es de 1977 y la segunda de 2009.
Carlos, aunque natural de Utrera (Sevilla), ha trabajado y vivido en Málaga desde 1970. Gran aficionado al cine (ha dirigido durante muchos años el cine fórum del Ateneo de Málaga) y al teatro: en 1972 fundó el grupo “Cascao” que llevó a cabo numeras representaciones de obras diversas.
Antes de contestar a las preguntas, ha preferido hacer una breve introducción:

Introducción
             Como breve introducción diré que en los apartados que contiene el cuestionario me voy a referir a la novelística o al relato, dejando a un lado mi producción teatral, que igualmente es un modo de expresión literaria pero donde se plasma el arte también con la escenografía. El texto en el teatro depende al final del montaje, o sea, de los actores, de los decorados y de los variados componentes de la representación. Cuando me refiero a la novela larga contemplo también el simple relato, aunque por su brevedad el ámbito estructural se someta a tratamiento distinto.

¿Qué crees que aporta tu obra literaria al conjunto de la literatura actual?
Sería demasiado pretencioso por mi parte especificar la aportación significativa dentro de un contexto tan enorme, ni siquiera aunque se tratase en uno básicamente más escueto. Lo que sí considero importante por mi capacidad de autor es hablar sobre la forma de mi narrativa que supone darle una dimensión especial al contenido, y puede suceder que quienes efectúen su lectura, les conduzca a plantearse el tema de la pregunta.
Muchas veces me han dicho, y yo lo he tenido a bien cuando me lo han preguntado, tus novelas y relatos no se pueden copiar por la forma que están escritos y los contenidos que desarrollan. Ni mucho menos pretendo que sean difíciles de leer, sino que tengan connotaciones que se acerquen a una narración que desemboque en una visión apartada de otros planteamientos autorales. Quizá lo deseable en cualquier obra es que quien la lea diga que está inmerso en una historia diferente, donde se traslada la estructura y el fondo a perspectivas desacostumbradas.
              Me formé en la cultura del cine y de la literatura, y hay elementos narrativos del primero que son buenos trasladarlos a la segunda; a fin de cuentas, el cine siempre ha bebido constantemente de la literatura. ¿Por qué no coger igualmente lo que contenga de particularidad este medio expresivo? Y pondré un ejemplo, una película desarrolla su recorrido con saltos de acción que no rompen su unidad y que a su vez hacen que intuyamos o sepamos lo que ha pasado, son huecos que quedan en el espectador para que inicie una actuación imaginativa, muchísimo más acentuada que en el desarrollo de una lectura. Es la visualización con que nos invade la película, y la descripción con la que se acompaña la novela. Y cabríamos preguntarnos ¿cómo crear una imagen viva a través de lo escrito? Por ello es bueno que se impregne con imágenes la novelística. Y así si en el cine se ve a una persona que pasa por detrás de unas casas y le persigue alguien, y luego vemos por la parte contraria aparecer al perseguidor con un objeto para una acción violenta, el espectador tiene imaginativamente que completar el espacio obviado y dotarlo del contenido correspondiente. 
             A mí en la narrativa me interesan estos saltos o huecos sugerentes que nos hacen intuir las cosas, así como abrir caminos diferentes en un punto determinado, aunque yo conduzca la acción hacia donde me interesa. Ejemplo en “Apuntes de una crónica negra”, la novela termina con una insinuación sobre el desarrollo de lo que va a pasarle al personaje central pero sin definirlo ni especificarlo. Acaba pronunciando la frase de “sintió como si le persiguiesen con un aliento pegado al cogote”. No obstante, una frase similar se encuentra al inicio, donde otro personaje siente ese mismo aliento, y a renglón seguido en el siguiente capítulo está muerto. No me interesa la tendencia del novelista a centrarse claramente en la muerte de ese personaje, pero sí hacer una solapada indicación del camino por donde se ha de seguir, aunque la acción no se haya completado. Se trata de matizaciones de la acción que recogen, de una u otra forma, algunos escritores. Nadie inventa nada.
            Por ello no puedo hablar de lo que aportan mis novelas y relatos, sino de las estructuras específicas de tratar los contenidos, que sirven para adquirir cierto tono novedoso. Me interesa de mi narrativa lo que conllevan en sí misma, nunca lo que aporta a la literatura actual, ni siquiera en cualquier otro ámbito regional o más reducido. Lo que si tengo presente es lo que por algunos se ha expuesto como un elemento fundamental de ella, que lo local se convierta en universal. O lo que es lo mismo, que identificándose mis obras con hechos concretos, alcancen perspectivas mucho más amplias.

¿Cuál consideras tu obra más importante? ¿Por qué?
            Hay una persona que cuando escribí la primera y la segunda novela, me dijo que cómo era posible escribir dos novela tan distintas. Hay otra que me aseguró a su vez, que se notaba que estaban escritas por un mismo autor independientemente de sus diferencias. Se trata de la exposición de una fórmula personal que me halaga cualquiera que sea el tipo de comentario.
          Ciertamente no podría afirmar cuál de mis obras es la más importante, sólo me pronuncio sobre la que me ha supuesto más trabajo, o cuáles son los componentes que me llevaron a realizarlas. Y esto que acabo de exponer no centra la pregunta a contestar de este apartado.
          Las novelas tienen sus dimensiones cuantificables en extensión que no tienen que coincidir con su valor, otras veces sus componentes y contenidos son semejantes a los de otros muchos escritores, y también es bueno decir que varios supuestos narrativos pueden quererse por igual. O sea toda novela debe contener las páginas que precise, nunca dimensionarla en exceso ni acortarla. Tengo reproducido constantemente, que el trabajo realizado en mis novelas, es de años, unas más y otras menos. Pero el resultado ideológico, formal y de respeto hacia ellas, ha sido siempre el mismo cuando las he concluido: mi satisfacción personal por creer que he escrito algo que merece la pena como fiel reflejo de una realidad que he visto y que la he conducido por el campo de la ficción, dado que se trata de una novela o un relato. Aunque siempre entiendo que la ficción debe tener ese punto de realidad o de verosimilitud. Decía un gran cineasta que lo que le preocupaba de las películas del espacio, era que el ser humano no fuera simplemente eso.
          La importancia está por tanto para mí, en la personalidad que uno le imprima. Yo podría informar que para la realización de mis novelas me inspiré en tan o cuál suceso, que me interesaba seguir el tema de una novela ya leída o que son cosas que me pasaron, pero garantizar que el novelista no se inspira en ningún supuesto o que lo narrado es fruto de la “creación”, me produce desconfianza porque parece que se está sacando de algún misterio celestial. Y es curioso porque ocurre, que una vez planteada mi narrativa de esta manera, nadie me ha hablado del modelo en el que me basé, porque en el fondo lo importante es que se haya constituido en una obra independiente sin que aparezca el reflejo aludido, o sea, como ya he afirmado, que sea distinta.
           La importancia que le doy, pues, es un concepto igualitario respecto a la totalidad de mi producción. Y me refiero que no sabría nunca elegir con un sentido preferencial a la otra,       anteponiéndose sobre todo el hecho de que el contenido tiene una única y exclusiva forma de aplicación por el autor que no deben ser desvirtuados ni cambiados, sino llevados a cabo tal como él los concibe y los representa.

¿En qué tipo de lectores piensas cuando escribes?

Se debe pensar únicamente en la historia que se narra y el desarrollo de la acción novelada. No pienso en ningún lector, porque ya estaría excluyendo a otros.
              En la escritura nadie debe traicionarse a sí mismo. Y esto lo hacen quienes piensan que una novela se hace para una búsqueda honorífica u ostentosa que englobe premios, editoriales importantes o un número de lectores fijados de antemano. Se debe pensar únicamente en la historia que se narra y el desarrollo de la acción novelada. No pienso en ningún lector, porque ya estaría excluyendo a otros. Además, la finalidad de cualquier publicación novelada, pretende, por lo general, que se convierta en la más leída del mundo. Cualquier otro planteamiento sería un tanto absurdo, porque nadie concibe trabajar en el campo artístico para conservarlo en un cajón. El hecho de ese extensivo conocimiento globalizador, es una ilusión que puede cuadrar perfectamente con una narrativa centrada por su autor en la aspiración de hacer únicamente lo que quiere, sin intentar hacer concesiones a un inmenso grupo de persona con sus dispares maneras de pensar. Y mucho menos pretender escribir las historias que hoy ofrecen una gran oportunidad de lanzamiento. Las personas se pierden con esa manera de escribir, y anulan su idiosincrasia, a pesar de que, a la larga, el tener como recompensa ser fieles a uno mismo, les lleve a muchos a quedarse en el olvido y en el silencio.
           Reconozco que la afirmación de que no me interesa fijarme en un tipo de receptor de mis novelas, sino en la posibilidad de que sea el mayor número posible de lectores, es una aspiración mucho más importante para mí. No puedo escribir con la idea de que vaya dirigida a un público en concreto, sino por el contrario al público en general, cualquiera que sea su estrado, sentimiento, edad o situación. No concibo nunca un lector determinado. Lo esencial es que quien quiera pueda coger el libro y leerlo, que es el proceso final para el que está escrito.
         Entiendo que es una idea que han abierto ya muchos escritores y artistas, pero desde mi punto de vista no puedo dejar de pensar en una realización a mi modo y, por ello, no excluyo a persona alguna, sobre todo si lo que pretendo es hacer visible la realidad e introducir al lector en el elemento testimonial que he desarrollado.
         En las presentaciones de mis novelas siempre me he dirigido a todas las personas. Sería excluyente que al estar hablando e intentando interesarles para que los asistentes al acto las lean, esté pensando solamente en algunos de los que se sientan en la sala, aunque sepa que enfrente haya personas que si deciden leerlas, que es lo que me agradaría, no les gusten.


Complementando la anterior cuestión: Perfil de los lectores que quisieras para tu obra.
       
De lo anteriormente expuesto se desprende que no escribo para un perfil determinado de lector,
no estoy condicionado por las cuestiones ideológicas, aunque las exponga, ni por ningún grupo de personas reunidas en un contexto social, ni por aquellos que no concuerdan conmigo y se sospecha que puedan no leer mis escritos, en este caso desearía que fuera todo lo contrario. Aunque rechacen mis obras por los motivos que sean, es bueno pensar que esos no admiradores las leerán porque se trata de una exposición que retrata la realidad como la siento y como la he visto y vivido. La vida en general, contada dentro del marco de la ficción debe de ser fuente de conocimiento para todos.
        Los que comulgan con mis pensamientos y mi forma de escribir,  percibirán en mi obra una cierta valoración al no tener discrepancias artísticas con ellos; aquellos que creyesen que no pudiera entretenerles, sería un buen momento para ser receptivos a lo ajeno y comprobar si en verdad lo que escribo les interesa o no.

Los personajes de Cervantes, cura y barbero, arrojan al fuego muchos libros y, con argumentos diferentes, salvan algunos. ¿Qué argumentos emplearías para defender tu obra si fuese acusada de falta de calidad y condenada por ello a la hoguera?
         El cariño que profeso a mi escritura quizá pudiera llevarme a enfocar esa decisión en el sentido de que en vez de que quemen algún pasaje de mis novelas y relatos, que metan en la pira al autor.
         Respecto a mí, lo siento. No se trata de un narcisismo imposible de desprendérmelo, es que cuando termino una escritura es porque he borrado, quitado, ampliado, unificado, veinte o treinta veces el texto de la novela o del relato. O lo que es lo mismo, si sé que hay algo que no me gusta, después de múltiples revisiones, lo quito sin contemplación porque no debe quedar. Cuando realizo algunas de mis narraciones me fundo en la totalidad con ellas.
        La defensa que haría, además de lo expuesto, es que cualquiera de mis historia contadas pretendo que forme parte de la realidad que me ha tocado vivir y por tanto que sea testimonio de nuestro tiempo.
        Como anécdota diré, que cuando me comunicó una editorial de cierto renombre que para publicar una de mis obras tenía que quitar algunos párrafos y frases del último capítulo, le dije que no, que no se le tocaba una coma. Lógicamente no se publicó.
        Es evidente que habrá autores que tienen preferencia por ciertos capítulos, párrafos o frases de sus novelas, pero yo no puedo separar la parte del todo. Es el conjunto de la historia, página a página, lo que al final la pone en valor o la desacredita.


Muchas gracias por tus respuestas.







Las entrevistas. Anuncio

Entrevistas
Antonio García Velasco

He enviado a una serie de escritores las preguntas de una entrevista. Iré publicando en este blog, las respuestas, en el orden en que me vayan llegando. Creo que será una indagación que puede dar resultados sorprendentes. Primero será el blog y, más tarde, un libro, al que, con permiso de los autores, podremos añadir algunas páginas de sus escritos y unas notas críticas.

Cada entrevista, irá precedida de unas breve nota biobliográfica y algunas fotos: autor, portada de algún libro...

Espero que os interese la idea.

lunes, 16 de mayo de 2016

Cernuda y la poesía actual

Cernuda y la poesía actual
Antonio García Velasco

La visión crítica de nuestros grandes autores es siempre aleccionadora. Puede que, en ocasiones, no compartamos sus criterios, pero, con seguridad, en todo momento, muestran el ejemplo de su genio.

Me detengo estos días en las críticas de Luis Cernuda a la literatura de su tiempo. Nos dice, por ejemplo, a propósito de la poesía de Moreno Villa, nuestro gran autor –y pintor- malagueño, más olvidado que leído: “Por muy  amigo que un poeta sea de la espontaneidad y naturalidad, no siempre puede ni debe aceptar los versos tal como se le ocurren en un principio: el trabajo espontáneo contribuye a que, algunas veces, sus poemas parezcan más bien borradores, esbozos de poemas”.

Podemos preguntarnos, ¿a cuántos poetas actuales se nos podría aplicar lo que Cernuda dice al considerar la poesía de Moreno Villa? ¡Quién esté libre de esbozos de poemas, que tire la primera rima!

En otro momento de sus estudios, dice Cernuda: “Parte de la poesía que hoy se escribe en español es prosa, y no de la buena”. Duras palabras. Pero, ¿hasta qué punto podríamos extrapolar lo que el poeta sevillano dice de su tiempo a lo que se escribe en el nuestro? Lo peor que puede pasarle a un poema es que, en siquiera en uno de sus versos, suene a prosa, a falta de ritmo, a falta o sobra de sílabas, a descomposición de la distribución acentual requerida. Es como si caminamos por la acera y, de pronto, pisamos un ladrillo suelto que nos salpica el agua de la lluvia de la noche anterior. Se nos nubla de pronto el día soleado. Además de mancharnos el pantalón, las medias o la falda.

Para completar su visión, aunque él mismo escribe prosa poética, nos dice: “Poema en prosa: tránsito circunstancial, no sé si consciente o inconsciente en el autor, desde el lenguaje eficaz para expresar en prosa un pensamiento, al lenguaje que es instrumento de creación poética”. Porque, en efecto, una cosa es un poema y otra, distinta, un pensamiento eficazmente expresado en prosa.