jueves, 10 de diciembre de 2020

039 Microcuento EL DIAGNÓSTICO


 

El diagnóstico

Antonio García Velasco


         Aquella doctora estaba convencida, como Cervantes, de que “la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago”. Por ello, siempre recomendaba una dieta sana y, con frecuencia, si así lo aconsejaba el estado del paciente, recetaba complejos vitamínicos.

Llegó a visitarla, con cita previa, Jacinta Valverde, achacosa y artrítica, malhumorada de soledad y falta de cariño. Le recetó, entre otros medicamentos y calmantes, un complejo de vitaminas y minerales.

Cuando Jacinta salió de la consulta, se sentó en la terraza de una cafetería, pidió un té con leche y, aun con la mascarilla puesta, escribió el siguiente ovillejo, estrofa a la que era aficionada desde que leyó el libro "Cantares de flores nuevas" de Antonio García Velasco:

 

¿Qué te causa tal dolor?

Amor.

¿No será más bien el reuma?

Se suma.

¿Qué te aporta mayor dosis?

Artrosis.

Será que avitaminosis

te produce esa desgana

que se siente de mañana

si mal de amor suma artrosis.

 

El té se le quedó bastante frío mientras ajustaba las sílabas y rimas de los versos.



2 comentarios:

  1. Me parece magnífico este cuento con este ovillejo. Pienso, si Dios quiere, emitir un artículo de opinión sobre el artículo que le envié titulado "Perduración del "ovillejo cervantino" y del conjunto de sus ovillejos de su libro Cantares de flores nuevas en el Diario Jaén. Además, antes va a salir otro artículo de opinión en el Diario Jaén sobre el conjunto total de poemas de su libro Cantares de flores nuevas. En hora buena.

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  2. El ovillejo rezuma y resume los males corporales y la falta de comprensión afectiva de Jacinta Valverde. Verde como el té en aventuras o desventuras amorosas; blanca como la leche por la artritis; desprovista del los bulbos y aromas de jacinto... Pero, dispuesta a la autocrítica en verso. Ése, a veces, algunas veces, es el trampolín para hacerle un doble salto mortal al prejuicio. ¡Que zurzan a las reglas sociales coactivas!

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